En la industria moderna del embalaje y la logística, el EPS se utiliza ampliamente en electrodomésticos, muebles, alimentos y transporte de productos frescos. Pero con ello surge una gran cantidad de residuos de espuma. Debido a que el material es ligero pero muy voluminoso, los costes de transporte y almacenamiento resultan muy elevados, lo que supone un problema para muchas empresas. Y el proceso de reciclaje de poliespán requiere el uso de ciertos equipos mecánicos, como la briquetadora de EPS.